lunes, diciembre 29, 2008

DOCEAVO MANDAMIENTO


El doceavo mandamiento debió ser:

"NO QUEJARSE"
Pero entonces estaríamos todos condenados.

sábado, diciembre 20, 2008

ESTRELLA REMENDADA

Miré al cielo y ayudada de mi imaginación ví la Estrella de Oriente, me pusé a pensar como en esos tiempos podían saber la llegada del niño Dios en tantos lugares del mundo y que en verdad esa estrella remendada es decir con una cola imaginaria, fuera el primer GPS de la historia.


Reflexioné entonces, que si no volvemos a ser como niños, es imposible entrar en el Reino de la Navidad. Porque sólo desde la nobleza de unos ojos limpios se puede atisbar, siquiera un poco, el infinito misterio de la vida.


Hay una alegría contagiosa en esas miradas, que revitaliza, cada diciembre, la aburrida Navidad de los mayores. Una mirada que nos conduce, gentilmente, a aquel belén de la infancia en torno al cual los vecinos, al abrigo de un ponche, un buñuelo o un aguinaldo de dulces, cantaban villancicos que se transmitian de generación en generación.


O a la paciente impaciencia con la que contábamos los días que faltaban para que el niño Dios o los Reyes volvieran de nuevo ese año a dejarnos un regalo.


Se extraña la pureza de la niñez, extraño aquellas nochebuenas, aquellas posadas, una autenticidad de la que hoy, desgraciadamente, carecen. Porque luego uno crece y empieza a traicionar al niño que fue, a convertir las felices pascuas en una feria de vanidades y mentiras, en la que ya no pinta nada aquella familia de Nazaret que tuvo que cobijarse en un establo porque no había sitio para ellos en la posada.


Aún así, habrá que seguir creyendo en esas revelaciones infantiles que nos salvan de las desolaciones de la existencia. Conviene mirar al cielo de vez en cuando. Por si vuelve a cruzar la misma estrella remendada que, la otra noche, encendió mis ojos.

martes, diciembre 09, 2008

LA CIMA

 Mientras voy de tu mano subiendo esta montaña de días, que unas veces son contigo y otras sin ti mi vida. Siento un mar de nubes que me acarician, que me aguardan y me dicen que cuide de tu risa. Que cuando pasen estos años y lleguemos arriba, nos estará esperando un parasiempre en la cima.

miércoles, diciembre 03, 2008

ZAPATOS DE TACÓN


Busco unos zapatos de tacón para compensar el desgaste de estás botas, unos zapatos que sepan llevarte hasta aquellos horizontes que anhelan tus ojos; unos zapatos que sepan bailar, caminar, saltar, jugar y que sepan latir al ritmo de tu corazón y mi corazón equilibrista.

MUNDO ALREVÉS

Nadie se muere de amor, lo que pasa es que nos da miedo el sufrimiento, como también es verdad que uno se acuerda de querer ponerse esa camiseta cuando esta sucia, tendida o en la lavadora.

Es cierto que a veces el corazón se nos escapa y nos deja ahí como inlatentes, porque corrió tras una mariposa que volaba demasiado alto.

También es cierto que a veces una habla cuando calla, y que el sonido del silencio de la palabra no dicha, consigue que se vuelva un cristal roto en su propia saliva, y el sentimiento te araña la garganta con una de esas uñas largas y blancas de manicure francés.

También es verdad, que a veces una se aleja cuando mas quiere acercarse, y que una a veces se queda cuando quiere marcharse.

Que a veces uno hiere a quien mas quiere y tiene paciencia con quien menos se la merece, que regalamos el corazón a quien no se lo gana y lo vendemos a precio alto cuando alguien de verdad lo quiere.

A veces creo que los sentimientos, las palabras, en general las personas somos un poco como un mundo al revés.

ALGODON DE AZUCAR

El algodón de azúcar es de lo más dulce, pero a veces al comerlo se endurece y produce una sensación desagradable. A veces cosas parecidas nos pasan en nuestra pequeña utopía y resquebrajan nuestro plan infalible de ser feliz y bla bla bla.


Si se necesita que la vida tenga sentido, es sencillo puedes aferrarte a cualquier pensamiento mundano, a cualquier sentimiento irracional (por ejemplo el amor) o al número de tu suerte como yo al 7, como quien dice otro número. Si de verdad quieres vivir, entonces sonríe: ¿le encontraste sentido a la vida?.

La vida, indefinible por los que les gusta definir las cosas, es tan perfecta que rebosa de cosas tan buenas, tanto como de malas, es cuestión de como brincar el charco.

PELUSA EN EL OMBLIGO

Mirarnos la pelusilla del ombligo, obliga a desempolvar los propósitos que se volvieron despropósitos, las huellas que se sueñan sin llegar a buscar el suelo, y a pesar del resfriado, me quito el abrigo y no siento frío. Tomarte de la mano y saltar todos los charcos que surjan en el camino. Sin buscarle sentido, razón alguna: dejándonos llevar por nuestros ojos, nuestros pasos, nuestros besos.
Es mirar en aquellas direcciones que quedaron al otro lado de la esquina.
Sucede que: es aprender a buscarnos y encontrarnos como esa media sonrisa que ahora tiene la luna.

lunes, diciembre 01, 2008

NUESTRA FELICIDAD

Quizás no importa tanto que vivamos cien años, lo que verdaderante importa quizás no podamos verlo con nuestros ojos.

Quizás bastase para dar sentido a la vida descubrirse regocijado por aquel rayo de luz que se coló entre las ramas del arbol ó entre la sonrisa de un extraño que cruzaba la calle.

Quizas baste con dirigir la mirada hacia el cielo y entender que ése no es el límite, y comprender que el mundo es redondo, ni plano, y que tiene más colores de los que podemos ver.

Que tus manos y mis manos son las manos de todos, que en realidad somos mucho más grandes de lo que jamás soñaremos.

Lo más difícil es asumir la responsabilidad de nuestra felicidad en nuestras propias manos.