domingo, marzo 22, 2009

POEMA 20

Cuando me siento triste y lejana se me viene todo el amor de golpe, y escribo y escribo para libe rar mi corazón a veces se me quedan las palabras como un nudo en la garganta y entonces Recuerdo a los poetas más excelsos y dejo que hablen por mi .....



Para que tú me oigas, mis palabras se adelgazan
A veces como las huellas de las gaviotas en las playas.
Collar, cascabel ebrio para tus manos suaves como las uvas.
Y las miro lejanas mis palabras.
Más que mías son tuyas.
Van trepando en mi viejo dolor como las yedras.
Ellas trepanar así por las paredes húmedas.
Eres tú culpable de este juego sangriento.
Ellas Están huyendo de mi guarida oscura.
Todo lo llenas tú, todo lo llenas.
Antes que tú poblaron la soledad que ocupas,
y estan acostumbradas mas que tu a mi tristeza.
Ahora quiero que digan lo que quiero decirte
para que tú las oigas como quiero que me oigas.
El viento de la angustia las suele arrastrar.
Huracanes de sueños A veces las tumban.
Escuchas otras voces en mi voz dolorida.
Llanto de viejas bocas, sangre de viejas súplicas.
Ámame, No me abandones.
Sígueme. Sígueme, en esa ola de angustia.
Pero se van tiñendo con tu amor mis palabras.
Todo lo ocupas tú, todo lo ocupas. [...]

2 comentarios:

Arlene Griselle dijo...

Hacia tiempo no lo leia.

Me gusto tu blog!

peyote dijo...

versos a vena abierta, sin duda.

Saludos.